martes, 19 de enero de 2016
Mi libro
Cuando la Luna brillo como el Sol
Dicen que en la vida hay que:
Tener un hijo: tengo tres hijas
Plantar un árbol: plante varios
Escribir un libro: aquí esta..
nocli
Corriendo
me baje del taxi en la estación del
ferrocarril, iban a ser las 21, 50, tenía que tomar el tren de las 22,00 que
salía para el interior.
Suerte
que en la boletería solo había una persona sacando pasaje, así ajustadamente
solo tuve tiempo de comprar un diario, para entretenerme un poco durante el
largo viaje que tenía que hacer, casi corriendo subí al tren.
Estaba
sentándome cuando se puso en movimiento, tras un largo pitido anunciando su
partida, rechinando las ruedas sobre las
vías, comenzó su larga trayectoria; Me acomode en el asiento, y puse mi único
equipaje, un portafolios al lado de la ventanilla, me apoye en él para resguardarlo en caso de
que me quedara dormido, no llevaba mas equipaje pues pensaba regresar a la
noche de ese mismo día, luego de acomodarme el saco, mire a mi alrededor , y
descubrí que pocas personas más viajaban en ese coche, luego me distraje
mirando las luces de la ciudad a través de la ventanilla, hacia un poco de
calor así que levante el vidrio solo unos centímetros, dejando entrar la brisa
nocturna , era fines de noviembre y habíamos tenido un día muy caluroso
anunciando la cercanía del verano.
Me vino a la mente el motivo de mi viaje, me
sentía feliz pues hacía tiempo que no andaba por el campo, y este iba a ser un
motivo para disfrutar del paisaje, y de los olores tan característicos de los
campos cerealeros. Recordando así mi niñez, cuando me tocaba llevar la lechera
con el mate cocido con leche y galletas de campo, a los trabajadores en tiempos
de trilla.
Me trepaba a la trilladora y hacia como que
manejaba la maquina. Divagando en la ensoñación de los recuerdos me trajo a la
realidad el guarda del tren pidiendo los boletos, le entregue el mío para que
lo marcara y aproveche para preguntarle a qué hora llegaríamos a Arroyito. --Me
mira medio sorprendido y me dice, y
calcule que más o menos a las 05,00 andaremos por ahí--.
No
aguanto su curiosidad.-- Que raro usted
por Arroyito ¿tiene parientes?-- No; le digo, voy por trabajo, entonces le
pregunte, él porque de su curiosidad,--
Es porque diría que conozco a toda la gente de ese lugar y no recuerdo haberlo
visto a usted nunca por esos lares--, usted sabe que en los pueblos chicos se
conoce a toda la gente; Si me imagino le dije, y aproveche para pedirle que en
caso de dormirme, me despertara cuando estuviera llegando.
--No se
preocupe me dijo --y siguió con su
rutina de pedir los boletos a los pasajeros, busque el diario que había quedado bajo el
portafolios, y me puse a hojear las noticias de la tarde ya que era una edición
vespertina , en la portada una foto del accidente del día, un colectivo había
chocado con una camioneta destrozándola de tal forma que casi estaba cortada por la mitad, es increíble que todos
los días haya algún accidente que le cuesta la vida a alguien, no sé si será por negligencia, o es
que cada día hay más vehículos en la ciudad.
El estridente pitido del tren me hizo levantar
la vista del diario , íbamos pasando por
una estación, donde no paro, miro la hora en mi reloj y veo que ya era la
medianoche, me acomode en el asiento, y me cubrí la cara con el diario con la
idea de dormir un poco , ya que tendría un día bastante movido y era tiempo de
descansar, cerré los ojos y mentalmente repase toda la actividad que tendría una vez de llegar a destino.
Era la
primera vez que iba a ese pueblo y no conocía a nadie ,sabia por lo que me
habían dicho en el trabajo, que era un pueblo rural de apenas unos tres mil
habitantes, así que no habría mucho por ver.
Mi empleo me había llevado a otros pueblos del
interior pero a este no lo conocía.
Trabajo en una
importante compañía de seguros que se especializa mucho con el campo,
asegurando sembradíos, maquinas rurales, y todo lo relacionado con el agro, en
una palabra, yo era una especie de perito en siniestros, y a este lugar,
justamente me traía el peritaje de un incendio que se había producido en unos
galpones cerealeros, pertenecientes a la Cooperativa Agraria de Arroyito; Un buen cliente de la empresa, a
quien mi jefe me había recomendado atender con deferencia , andaba en estos
cabildeos cuando me he quedado dormido.
Me sobresalte cuando el guarda me toco en el
hombro para despertarme.-- Próxima parada es Arroyito, faltaran unos 15 minutos
y llegamos, me dijo--; Le agradecí y comencé a prepararme para bajar, recogí el
diario que se me había caído, y desparramado bajo el asiento, lo acomode, y lo
guarde en el portafolios, me prendí el botón de la camisa y me acomode la
corbata, en ese momento sonaba el pitido del tren, avisando que
llegábamos, --miro el reloj y eran
casi las5,00-- ya estaba clareando, y pintaba que sería un día caluroso, cuando
comenzó a parar baje al estribo del coche, y por costumbre, me largue todavía en movimiento, era el único pasajero
que descendía. En el andén, el encargado de la estación, se acerco a recibir un
paquete de diarios y revistas, me fui directo al baño, y cuando regrese, le
pregunte al mismo empleado, por algún
lugar donde desayunar.--Me mira y dice,
a esta hora no va a encontrar nada
abierto, pero a eso de las 7,00, abre el bar del turco-- Saliendo de aquí,
cruza la calle y camina a su derecha hasta la esquina, luego dobla a la
izquierda, hace tres cuadras hasta la plaza, en la esquina esta el bar,-- es el
primero que abre me dijo.--
Le doy las
gracias y me quede mirando el tren que se iba. Cerca de las vías había silos y
galpones, seguro que ese sería el lugar de mi destino; comencé a caminar en la dirección
indicada, la madrugada invitaba a ese paseo., Al lado de la estación había unos
eucaliptus enormes, y en lo más alto de sus ramas, un benteveo saludaba la
proximidad del astro rey; ¡cuánto tiempo hacia que no lo sentía!, seguro desde
mi infancia cuando vivía en el campo. Ese saludo, es algo que desde chico llamo
mi atención, y me aventuro a decir que no hay muchas personas que lo hayan
notado, pues es casi un rito, es sin dudas un saludo al sol,
Todos conocemos el grito del benteveo cuando
entona su ¨bicho feo, bicho feo¨, pero el saludo al sol, es distinto. Se para en la parte más alta del
lugar, y mirando la salida del sol pega un aleteo, levanta vuelo unos diez metros, y se deja
caer entonando algo así como Veooo… ayyytiiirrr ......tirrrr........tirrrr...castañetea
con el pico, y vuelve a posarse en la rama. A veces se me ocurre que está
diciendo ¨Aquí tierraaaaaa....tierra...tierra¨, este saludo lo repite durante
unos quince minutos, luego, se retira del lugar, durante el día, jamás lo sentí
entonar ese canto, aunque a veces,
cuando se enoja o pelea con otro, hace
castañetear su pico.
Cuando doblo en la esquina me invade un exquisito
perfume de las madreselvas en flor, que traen a mi mente recuerdos de mi madre,
que tanto le gustaban las flores, especialmente las madreselvas, y los nardos
por su delicado perfume, sigo caminando, me cruzo con algunos parroquianos
madrugadores que me miran sorprendidos. Tal vez por mi atuendo, aun así, me
saludan amablemente, como suele pasar con la gente del interior. Creo que fue
en ese momento, que comencé a oír aquel raro sonido, o por lo menos, fue el instante en que le preste atención, ya
que no me resultaba conocido, sigo
caminando, pasan algunos autos y una
camioneta, ya comenzaba a haber
movimiento en el pueblo. Llego al fin a la plaza, y efectivamente en la esquina
una vieja casona donde se destacaba en su frente ¨Bar El Turco¨. Estaba aun con
la persiana baja, así que decidí cruzarme a la plaza, y sentarme en un banco a
esperar que abriera, miro mi reloj, iban a ser recién las 5,30. Otra vez, ese
extraño sonido, era realmente algo muy extraño, mescla de chirrido, que se
parecía a un alarido, a un lamento, me quede pensando que podía ser. La mañana
estaba realmente hermosa, la brisa matinal traía la frescura y los aromas del
campo, el sol, ya iluminaba los techos de las casas, frente a mí, cruzando la
calle, en una cornisa, otra cosa que hacía mucho no veía , estaba coronada de
conejitos en flor, de varios colores, siempre me pregunte, como iban a parar
las semillas a las alturas de los edificios viejos, tal vez sea obra de los
pájaros, me quede un rato pensando, era otra de las tantas cosas raras de la
naturaleza.
Luego abrí mi portafolio y saque el diario, con el
fin de pasar el rato hasta que el bar abriera sus puertas.
Otra vez el sonido, pese a ser en principio agudo,
terminaba en un lamento, casi gutural, se cruzaron por mi cabeza distintos
recuerdos, buscando, en definitiva algo que se pereciera a eso, así es que
recordé, una vez que fui a visitar a un pariente al campo. Estábamos cenando
cuando me dice,--Te aviso que si sentís un grito esta noche, no te asustes
porque es el molino--, ¿cómo? le pregunte, --Y pasa a explicarme--, Un viejo
molino a pocos metros de la casa, al mover la cola, la brisa nocturna, la vieja
máquina, chirriaba y parecía un alarido. --Así que llego la hora de ir a
dormir--, A eso de las 3,00 de la madrugada me despertó el sonido del molino,
puedo asegurar, que ese ruido le ponía los pelos de punta al más pintado de los
corajudos. Menos mal que me habían avisado, estaba en estos pensamientos cuando
volví a sentir el misterioso sonido. Ahora trajo otro recuerdo de mi niñez,
cuando llegaban circos a mi pueblo. Solían acampar a unas pocas cuadras de
donde yo vivía, si traían algún tigre, león o alguna fiera, por la noche estos
animales gritaban, terminando sus gritos en forma gutural ,de baja frecuencia,
bien, este sonido de marras, tenía algo de estos recuerdos, decidí prestarle
más atención. Estaba en estos pensamientos cuando siento el ruido de la
persiana del bar.
Bueno al fin podría lavarme un poco y desayunar. Otra
vez el sonido, ahora parecía más seco como si fuera el chirrido de dos maderas,
era algo muy raro.
Pongo el diario bajo el brazo, tomo el portafolios y
me cruzo, me quedo parado frente a la puerta,
esperando que terminaran de abrir las ventanas, cuando se abre la
puerta. Un señor bastante fornido,
amablemente me invita a pasar; --¨pase sañur, enseguida lo atiende¨--, me dice
con el acento característico de los inmigrantes del medio oriente; Termina de
abrir. -- Me mira de arriba abajo y me dice, ¨que desea sañur..., --Le
contesto, que quiero desayunar si es posible, y me dice que solo puede
ofrecerme, café con leche con galletitas, o algún sándwich con pan del día
anterior, pues el panadero, recién a las 8,00 le trae el pan y las medialunas,
Entonces le digo que con un sándwich está bien, le pido pasar al baño para
higienizarme un poco, --Se da vuelta y me dice, por el pasillo, la segunda
puerta a la derecha, vaya que mientras
le preparo el café.--
Encaro por el pasillo, abro la puerta y me encuentro
en una habitación enorme, azulejada de blanco, con una mesa y un banco en un
lado, coloco mi portafolio sobre la mesa y lo abro buscando en uno de los
sobres una toalla, y el jabón. Sabía que mi señora, la había acomodado bien
planchada para que ocupara poco lugar; me saque el saco, la corbata, y procedí
a lavarme la cara, para despabilarme un poco, y de paso asearme., Luego doble
bien la toalla, la coloque en el portafolios, y termine de arreglar la
corbata, me pase la mano por la cabeza,
aplastando el poco pelo que me quedaba, y me encamine al bar. Me siento a
esperar mi desayuno, y veo que llegan cuatro parroquianos, riéndose y
vociferando, saludan con un: buen día, y se sientan en una mesa cercana, Siguen charlando sin prestarme más atención,
tenían pinta de trabajadores municipales, hablaban bastante fuerte. Siento
cuando uno comenta: Anoche no me dejo dormir ese bicho de mierda, y otro
comenta, no sé porque no lo matan de una vez así no jode mas, a mí me tiene
podrido, lo tengo a una cuadra de casa, y es insoportable, comenta otro. A mí
se me cruzo por la mente,-- ¿Sera ese el ruido que tanto me intriga desde que
llegue al pueblo? ¿Un bicho? --
Estaba en esos
pensamientos cuando se me acerca el turco con el desayuno, café con leche,
y un sándwich hecho en un pan francés
descortezado, y cortado en cuatro, demás está decir que no lo pude terminar;
comenzó a entrar gente al bar, y todo el mundo saludaba amablemente, no sin
antes sacarme una radiografía, por mi traje y corbata. Era evidente que por el
lugar no era muy común, me quede un rato en el bar haciendo tiempo, luego llamo
al turco, para abonarle el desayuno, y no aguante mas. Le comento, que había
sentido a los parroquianos que ya se habían ido, hablar de un bicho que los
molestaba,-- ¡ah! dice ,-- , es Luna ,una leona que dejo el circo este
invierno. La tiene el gitano, en parte de pago por el alquiler del predio que
no pudieron pagar, es un bicho muy molesto, me dice , nadie del pueblo la
quiere, y están esperando que se muera , en ese momento entra más gente al
local, el turco me pide permiso y se retira. Yo me quede pensando en lo que me
había dicho de la leona, realmente, pese a que
había alguna reminiscencia, del bramido de una fiera , ese sonido poco
se parecía, así que quede más intrigado
aun.
Antes de irme salude al turco, le di las gracias por
su atención, y de paso le pregunte por la oficina de la cerealera; --Ahí nomas
cruzando la plaza me dice--, Me tiende la mano muy amable junto a un,-- Hasta
cuando guste sañur... --
Salgo de ahí y me dirijo hacia el lugar de destino en
ese pueblo, llego hasta la puerta y veo que tiene un letrero con el horario de
apertura, 8,30,miro mi reloj y faltaban unos veinte minutos, me cruce
nuevamente a la plaza y me senté a esperar que abrieran, ahora el sonido se
sentía más fuerte. Abrí mi maleta y revise la papelería que llevaba, busque mi
cámara fotográfica, la principal herramienta para mi trabajo, pues con ella
documentaba lo siniestrado, me cerciore de que tenía dos rollos más, de
película 35 mm. , por entonces todavía no había maquinas digitales, así que
resultaba imprescindible contar con repuestos, el extraño sonido, que ahora
sabia que en realidad era un lamento, sé
repetía cada tanto, estaba tan intrigado que ya me había decidido a ir, luego
de cumplida mi tarea, a ver en qué
condiciones estaba ese animal. No paso mucho rato, cuando paro una camioneta
frente a la cooperativa, bajan dos personas y se disponen a abrir el local,
iban ser las 8,55, cerré mi maletín, me arregle la corbata, y cruce la calle, me acerco y saludo, uno de
ellos me pregunta, usted viene a la Cooperativa, si--,.Soy de la aseguradora
¨¨La Cosecha¨¨y vengo por el siniestro de los galpones-- ¡Ah! Me dice, pero el
gerente llega recién a las 10,00, va a
tener que venir más tarde, nosotros no podemos hacer nada, eso lo maneja don
Pedro, dice el otro. Bueno ya resignado
a esperar, les pregunte si estaba muy lejos lo del gitano; --siga aquí derecho
tres cuadras y ya lo va a encontrar por
el grito de Luna--, No le pregunte quien era Luna pues ya lo sabía, a esa hora
el sol estaba picando muy fuerte, así que me saque la corbata y desprendí el
cuello de la camisa, ya me molestaba hasta el saco, lamente no haber venido mas de campo, con una chomba y una camperita liviana, pero en la
capital, ya me había habituado al traje y la corbata., Comencé a caminar rumbo
a lo del gitano, no sabía con que me iba
a encontrar, el portafolio me pesaba una tonelada, y la transpiración
comenzaba a mojar mi cara, camine las tres cuadras, y lo primero que detecte
del lugar fue un olor nauseabundo, casi en la esquina, había restos de una
vieja construcción, de la que quedaban parte de una reja de unos tres metros de
alto, flanqueado por una pared alta en un costado, frente a la reja por la
parte de atrás, una pared hecha de ladrillos amontonados, que formaban una ele,
cerrando así lo que sería una jaula precaria. Me acerco con cautela esperando
ver una fiera, y no vi nada, en ese momento, sentí aquel sonido que tanto me
había intrigado, me acerco un poco más, y veo un saco de huesos en un rincón,
era lo que alguna vez había sido la compañera del rey de la selva, era tan
lamentable la imagen de esa criatura, o mejor dicho de lo que quedaba. Eso que
estaba ahí, apenas pesaría unos cuarenta kilos, cuando el peso de una leona
adulta llega a los 175 kilos, fue algo muy fuerte, que me golpeo en lo más
intimo., Era una piltrafa, con los ojos casi cerrados por las lagañas, y llenos
de pus, tapada de moscas, al extremo, que no entiendo como no estaba agusanada, en la jaula no había ni rastros de
agua, y ni hablar de comida; Le hable, y era como si no me hubiera oído, en el
acto pensé, que yo tenía que hacer algo por ese animal.
Al costado, del lado de la casona había una escalera
de material que daban a una puerta en la planta alta, me supuse que ahí viviría
el gitano, antes de subir golpee las manos varias veces, como no salía nadie
subí las escaleras y golpee la puerta, --¿quién es?-- salió del interior; ando
buscando al gitano dije, espere un momento,
se abre la puerta, salió un personaje de baja estatura pero muy morrudo,
con una musculosa, que alguna vez había sido blanca, llena de agujeros, y en
calzoncillos. --¿Qué quiere?--
Suponiendo que
era el gitano, le dije que quería saber porque tenía la leona en esas condiciones,
me mira de arriba abajo, y de muy mala manera me dice: Porque no se deja de
romper las pelotas, me viene a sacar de la cama por esa boludez, pega un portazo cerrando la puerta, no
satisfecho, vuelvo a golpear, se abre la puerta, y sale el personaje con una
escopeta de dos caños, muy caliente me dice, te vas o te cago a tiros, por
supuesto, que ante esa postura no me quedo más remedio que bajar las escaleras
sin decir nada, me acerque a la jaula, y le
dije al saco de huesos, que algo iba
a tratar de hacer, di media
vuelta y volví tras mis pasos hasta la
plaza. Mientras caminaba, pensaba que hacer, miro el reloj y faltaba todavía
para las diez, así que cuando llegue a la plaza, me acerque a la Intendencia
que ya había visto junto a la Iglesia del pueblo, me puse el saco y la corbata.
Entre a un pasillo largo, al fondo, sé veía un patio
enorme, con un aljibe en el centro, todo pintado de verde al mejor estilo
colonial, a mi derecha, un letrero que decía Mesa de Entradas, entro, y me
atiende una señorita muy amable, pregunto por el intendente; me responde,--
mire señor el Doctor hasta después de las once no viene, ahora está en el
Hospital--, bueno pero estará el Secretario de Gobierno; Posiblemente por mi
vestimenta, se preocupo por atenderme, un
momentito que me cruzo a la oficina de enfrente a ver si esta, así es que
enseguida vuelve, y me invita a cruzar.
Sale un señor de unos cincuenta años bajito, y muy
amable me dice, pase a mi oficina por favor --¿en qué puedo servirle?--
Mire yo vengo pues he visto la herejía que se está
cometiendo con un animal, me mira sorprendido y me dice --¿dónde? --me refiero
a la leona que tiene el gitano--. ¡Ah! Eso--, por favor no pierda su tiempo y
me haga perder tiempo a mí, ese bicho ya sé tendría que haber muerto. No me
diga, usted como gobierno tiene que
hacer algo le digo, sino voy a esperar al Intendente.
Larga una carcajada y me dice, el Doctor lo va a sacar carpiendo, mire por la pavada que
viene, usted con su trajecito quiere impresionarnos, este es un pueblo de gente
tranquila, le aconsejo que se vaya y no vuelva, el Doctor está muy ocupado,
para preocuparse por un bicho que nadie quiere en el pueblo.
Estuve a punto de contestarle, y me contuve, mire mi
reloj y ya estaba en hora de mi trabajo, igual le di las gracias por atenderme,
y me retire, me fui muy desilusionado y dolorido por la falta de sentimientos
de esa gente.
Llego a la
Cooperativa, y un empleado me atiende,
pase usted que ya llego don Pedro, me hace pasar a una oficina donde un señor, me
recibe con una amplia sonrisa,-- Lo estaba esperando amigo--, recién llamaron
de la capital preguntando, si usted había llegado, así es que luego de las
presentaciones, me invita a subir a una camioneta, y partimos hacia los
galpones; Por el camino me comenta lo raro del incendio, pues en 16 años que
tenia la Cooperativa jamás había ocurrido algo así. Hay mucha precaución para
evitar los incendios, comenzando que está totalmente prohibido fumar, y
encender fuego cerca de los galpones me comenta.
El lugar era el que yo me imaginaba, a un kilometro
aproximadamente de la estación y cercano a las vías, llegamos y nos recibe el
encargado, que tenía su vivienda ahí, y era también quien oficiaba de sereno,
luego de los saludos vamos a ver el siniestro, lamentablemente toda la semilla que había en su interior se
había perdido, parte por el incendio, y parte por tanta agua que habían echado
los Bomberos para apagarlo, también el galpón estaba muy deteriorado por efecto
del calor, que había retorcido vigas y chapas de zinc.
La perdida era
total; abrí mi maletín y saque mi vieja Voigtländer de 35 mm. comencé a sacar
fotografías del lugar, para documentar bien el informe, que tendría que llevar
de regreso, luego don Pedro, convoco a toda la gente que estaba trabajando, a
un amplio salón, donde comenzó un interrogatorio, para saber si alguien había
visto algo anormal en los días previos al siniestro, nadie sabía nada ,pero
todos suponían que podría haber sido un linyera (vagabundo) , de los que suelen
llegar en los trenes de carga, es posible que hiciera fuego al lado del
galpón y alguna chispa entrara por un
respiradero provocando el incendio.
Luego de larga charla con los trabajadores, y de haber
tomado gran cantidad de fotografías ,estaba listo para hacer el informe
requerido en estos casos; Volvimos al centro del pueblo, entramos a la
oficina a ultimar algunos detalles, ya
era casi medio día , yo tenía previsto regresar en el tren que pasaba a las
14,00 horas, así que aun tenía tiempo para averiguar algo más de Luna, le
pregunte a don Pedro sobre el animal, y
me dijo mas o menos lo mismo que los demás, no tenía ni idea de las condiciones
miserables, que se encontraba eso, que alguna vez había sido una fiera, me
apure a despedirme y salí de ese lugar , para regresar a lo del gitano,
Mientras caminaba en esa dirección otra vez el lamento, lo primero que hice
cuando llegue, fue sacar mi máquina fotográfica, y procedí a tomar fotos desde distintos
ángulos, de esta forma, documente gráficamente la situación lamentable del
animal, pensando que tal vez podría hacer algo por ella.
El espectáculo era deplorable, sé me vino a la mente
aquella inspirada canción de (1) Chico Novarro,--(Carta de un león a otro)--,
realmente muy triste la vida de los animales en cautiverio; No entiendo como
todavía tenía algo de vida, pues solo unos huesos blancos, algunas cascaras de
papa y restos de verdura, no había otra cosa en la jaula, era evidente que
sobrevivía, porque alguna alma piadosa le tiraba sobras de comida.
Antes de irme, me acerque a ese despojo de animal que
estaba con los ojos cerrados, me puse en cuclillas a su lado a través de la
reja, y sentí el impulso de acariciarla. Introduzco la mano y la paso
suavemente sobre el morro acariciándola , al sentir mi mano, entreabre los ojos,
hago un movimiento brusco para retirar mi mano, pensando que la perdería entre
las fauces de la leona, pego en la reja, y pierdo el equilibrio, introduciendo
todo el brazo dentro de la jaula, instintivamente cerré los ojos, esperando
quedarme sin brazo, cuando siento como si una madera rozara suavemente mi mano,
abro los ojos, y veo que era la lengua reseca del animal, que me devolvía la
caricia., Se me estrujo el corazón, no me avergüenzo en decir que se me cayeron
las lagrimas, y le hable ,le hable como se le habla a un ser querido,
prometiéndole que no me iría del pueblo sin haber hecho algo por ella, después
de acariciarla largo rato, me incorpore , ya había tomado una determinación,
guarde mi máquina fotográfica, me despedí de Luna y retorne, pensando en volver
a la Intendencia a hablar con el Intendente. Cuando cruce la plaza, me fui
directamente al lado opuesto, donde había visto una estación de servicio, me
acerque y compre 5 litros de nafta que me entregaron en una bolsa plástica,
comencé a caminar rumbo a
la Municipalidad, y al pasar por un kiosco compre un encendedor. Ahora
si estaba preparado para ver al jefe del pueblo, entre, y me dirigí a mesa de
entradas, hable con la misma persona que anteriormente me había atendido, y le
pedí hablar con el Intendente, seguramente vio algo en mis ojos. Un momentito me dice y se cruza enfrente
donde estaba el despacho del Secretario de Gobierno, enseguida sale este,
diciendo que el Intendente no puede atenderme pues está ocupado.
Bien le digo,
si no quiere salir por las buenas, lo tendrá que hacer por las malas, y comencé
a regar con nafta los pisos de madera, no, no,--¿qué hace? , ¿Está loco?--, Si, le digo, ustedes me vuelven
loco, o me atiende el Intendente o le prendo fuego, y saque el encendedor, ya
bastante alterado y por los gritos, apareció un hombre delgado de unos sesenta
años, que quiere, yo soy el Intendente me dice.
Quiero que haya
un poco de humanidad en este pueblo miserable, quiero que mande alguien a darle
de comer y beber a ese pobre animal, que tiene el cretino del gitano,--y que
ustedes prefieren ver muerto--; usted está loco me dice, si piensa que yo me
voy a preocupar por ese bicho de porquería, a todo esto la chica que me había
atendido, sé había ido a llamar a otros empleados.
Llegaron pretendiendo entrar, ahí, les pego el grito
no entren, si no quieren morir quemados, y vuelvo a regar con nafta, ahora las
paredes y los muebles ,y prendo el encendedor; viendo mi actitud decidida, el
Intendente me dice,-- Espere, espere que quiere que haga--.
Quiero que ya mande gente a darle de comer y beber a ese animal;-- bueno, bueno
tranquilo--, haber José, le dice a uno de los que habían quedado afuera, vayan
al matadero, y llévele comida a la leona, y de paso dígale al jefe de Bomberos
que vaya con un tanque y limpien la jaula, y que le den agua.
Si, y que sea rápido digo yo, --bien Doctor salgo
enseguida dice el tal José y se fue corriendo--, Dicho esto apago el
encendedor, justo, cuando cae la Policía, entra un tipo de civil con un agente
por detrás.
--Por fin
comisario le dice el Doctor--, antes que hablara, le digo, Comisario, tome
nafta para el móvil, ya no la necesito;-- Así que usted ha hecho todo este
lio--, me va a tener que acompañar, me sigue por las buenas o lo hago esposar,
no hace falta le digo, no soy mala persona, si hice esto fue porque era la
única manera que el señor Intendente me atendiera.
El Doctor al ver que también había estado en falta, le
dice al Comisario, la verdad que tiene razón, yo fui muy torpe, al no querer
atenderlo como a un ciudadano cualquiera, ahí, el Comisario se afloja un poco
y dice, --porque no me cuenta lo que
paso--, ahí nomas y lo más rápido que pude,
pase a explicar lo que había pasado, Comisario , yo que usted,
mandaría a un agente con este muchacho que fue llevarle la comida
a la leona, porque el gitano me amenazo con una escopeta, si iban a molestarlo
los iba a sacar a tiros; a ver Cabo,
avise por el móvil que vaya alguien a lo del gitano , y si se resiste llévenlo
preso, ya me tiene cansado con sus amenazas a todo el que pasa por ahí.
El comisario ahí mismo me pide documentos, le
entrego mis documentos y mi credencial
de la empresa para la que trabajo, entonces les digo que la persona que me
conoce en el pueblo, es don Pedro el gerente de la Cooperativa Agraria, quien
puede testificar a mi favor, el
Comisario lo hace llamar, y a los 5 minutos estaba don Pedro en la
Intendencia, cuando me ve me dice.--, En que lio se ha metido amigo, ha
revolucionado el pueblo--; Comisario, le dice este hombre ha venido a hacer el peritaje del
incendio, y le garantizo que es buena persona, no lo va a meter preso ahora, que en un rato tiene que
viajar.
Bueno dice el
comisario, todo depende del Doctor, si él no levanta cargos, yo nada puedo
hacer.
Trate de
explicar a todos, que mi única intención era no dejar que la leona se muriera,
y si no la atendían en el pueblo, yo iba a gestionar para llevarla a un
zoológico. Entonces se me ocurrió una idea para asustarlos un poco, ahora que
están aquí juntos ,las fuerzas vivas del pueblo, les hago esta propuesta ,
ustedes que prefieren , que el pueblo de Arroyito , sea conocido en todo el
país , como un lugar de gente caritativa y con sentimientos, o por el contrario
como un lugar de gente desalmada , que maltrata a los animales , al extremo de
desearles la muerte, porque , ni bien llegue a la Capital , voy a ir a los
diarios y canales de tv, también a la Sociedad Protectora de Animales, hasta
encontrar alguien que me ayude a recuperar este pobre animal.
Todos se quedaron callados, aproveche para decir, a
partir de este momento lo hago a usted Doctor responsable por la vida de esa
leona, se miraban entre ellos, hasta que hablo el Intendente, está bien
Comisario, déjelo ir a este hombre, la verdad que tiene razón.
Les agradecí a todos, y les pedí disculpa por el mal
rato que habían pasado, y le digo a don Pedro, si el Comisario me lo permite,
quisiera que me llevara hasta lo del gitano a despedirme de Luna, y luego a la
Estación del Ferrocarril, el Comisario me devolvió los documentos, y sonriendo
me dice, si vuelve espero que venga más tranquilo. Ah y gracias por la nafta,
me tiende la mano, lo saludo y luego hago lo mismo con todos, el Doctor , me
toma de la mano y mirándome a los ojos , me dice ,hoy usted nos ha dado una
lección, háganos quedar bien que yo le voy a cuidar a la (nena) hasta que
vuelva.
Don Pedro me
dice, vamos porque va a perder el tren,
subo a la camioneta y enseguida estuvimos en lo del gitano, que dicho sea de
paso lo encontramos esposado al paragolpes del patrullero, cuando me vio, menos
bonito me dijo de todo, ya los bomberos habían lavado la jaula, y encontré a
Luna prendida a la cabeza de un hueso, pero aun así cuando me vio levanto la
cabeza y ensayo una especie de saludo, le hable y parecía que me entendía lo
que le decía, hizo un gran esfuerzo para pararse y se acerco a la reja sin
dejar de roer el hueso, metí la mano para acariciarla una vez más , y todos
pegaron el grito, cuidado que le va a sacar la mano.
Sin hacer caso la acaricie y trate de sacarle las
lagañas, le pedí a uno de los bomberos, si podía alcanzarme un trapo mojado,
con el trapo le limpie bien los ojos, luego me enderece y le prometí que
volveríamos a vernos, me doy vuelta y veo que todos están con la boca abierta,
en expresión de sorpresa, don Pedro me dice,-- si no lo veo ,no lo creo--, lo
miro y le digo, esta pobre criatura , además de falta de comida ,esta falta de
cariño, saludo a todos , y le pido a don Pedro que me lleve a la estación
,vamos me dice que ya son menos cuarto, subo a la camioneta y partimos rápidamente, dejando
atrás el comentario de toda la gente que se había reunido en el lugar, me deja
en la estación , lo saludo y le agradezco todo lo que había hecho por mí, le prometí que pronto tendría noticias mías,
y le pedí, que cuidara de Luna, que estuviera bien atendida, cargue mi maletín,
salude afectuosamente a don Pedro.
Entre en la
estación, saque boleto y me dirigí al andén, donde esperaban una pareja con un
bebe en brazos, ya se acercaba el tren dando una larga pitada, sentí en ese
momento que mi estomago, me avisaba que no había ingerido nada desde la mañana.
Subí al tren esperando que hubiera coche comedor, me acomode en el primer
asiento, esperando que viniera el guarda pidiendo los boletos, para preguntar
si había posibilidad de comer algo, la parejita subió en otro coche, en este
viajaba bastante gente, al menos estaría más entretenido, la formación se puso en movimiento y el guarda no tardo en aparecer.
--¿Como le fue
por Arroyito amigo?--, lo mire sonriendo, le digo muy bien, por aquí la gente
es muy amable; ¡¡Ah vio!! estos son pueblos tranquilos, aquí no es como la
capital, aquí se conocen todos, me dice mientras pica el boleto, aprovecho para
preguntarle por el comedor, me dice, si
se apura tal vez pueda comer algo, el segundo es el comedor, levanto mi
escaso equipaje y me apuro, Entro y me acerco a la barra, pregunto si aun se
podía comer algo, y amablemente me contesta el mozo que atendía, --lo único que
le podemos ofrecer a esta hora, es milanesa con fritas--, está bien le digo,
mientras la preparan voy al baño a lavarme
las manos.
Regreso y me acomodo
en una mesita individual, delante mío había una mesa con dos señoras ,
que estaban terminando de almorzar, en otra un señor tomando un café y leyendo
un diario, se acerca el mozo y me pregunta que voy a beber,-- si tiene vino
blanco bien frio, por favor tráigame una botella de medio--, bien me dice y se
dirige a atender las señoras que lo habían llamado, no se hizo esperar mucho ,
regreso con los cubiertos, la milanesa y las papas fritas, ya le traigo el vino
me dice, y enseguida vuelve con la copa, el vino, y una
servilleta.. La milanesa estaba riquísima al igual que las papas, tal vez me
pareció más rica por el hambre que tenia, así que la deguste con fruición.
Mientras, recordaba lo vivido esa mañana, me cuestione a mí mismo, el porqué de
la reacción violenta que había tenido, por qué me conmovió tanto la reacción de
la leona; Cuando yo pensé, que perdía mi brazo en sus fauces, me responde
lamiendo mi mano, lo recuerdo y se me
estruja el corazón, fue como si hubiera apretado un gatillo dentro mío, que
disparo esa locura de hacer algo por ese animal, nunca me había ocurrido algo
así.
Como lo he mencionado, me crie en el campo y he visto el sufrimiento de un
caballo con una pata rota, o una oveja agusanada, o un ternero enredado en un
alambre de púas, siempre, lo primero que se hace es tratar de curarlo, y si no
se puede , se sacrifica, para evitar que sufra; Pero nunca había sentido esa
mescla de ternura y bronca, que sentí cuando vi en las condiciones que estaba
esa pobre criatura, también se me cruzo por la mente un recuerdo que me
atormento durante mucho tiempo. Fue un año que tuvo mucho valor la liebre, y solíamos salir a
cazar de noche con reflectores, matábamos
unas doscientas liebres por noche, y al otro día la llevábamos al pueblo
para venderlas, a veces encontramos alguna aun viva, con las patas rotas o las
tripas afuera, eso es algo que me cuesta
perdonarme, tal vez por eso es que ahora no puedo ver sufrir a un animal.
Termine de almorzar, pedí un café y la cuenta, al rato
regreso el mozo con el café y la adicción. Ahora con el estomago lleno era otra
persona, termine mi café, pague, agradecí la atención, y regrese al coche, me
ubique en el mismo asiento , coloque el portafolios a mi lado y me apoye en el, dispuesto a
hacerme una siesta, me seguía dando
vueltas el tema de Luna, y me puse a pensar cual serian mis pasos a seguir una
vez de llegar a la Capital.
Tal vez se pregunten, como un tipo de campo había ido
a parar a la gran ciudad, el tema es así, un día fui a visitar unos amigos en
mi pueblo, y conocí a un linda morocha, amiga de ellos que estaba de visita,
fuimos presentados y simpatizamos desde el primer momento, así es que esa
morocha es ahora mi esposa., Pero a ella
le costaba mucho acostumbrarse al pueblo, ya que sus únicos conocidos
eran estos amigos, buscamos la forma de acercarnos a la Capital donde vivían
sus padres, y amistades de toda su vida, así que un día la solución llego de la mano de un tío
de ella ,que era socio de la aseguradora, al conocerme y saber que era gente de
campo, me ofreció , de ser el nexo con el agro, o sea cada vez que hay que ir
al campo por cualquier tema del seguro, soy el encargado de hacerlo.
Durante un
tiempo me costó acostumbrarme, pero con tal de ver a mi esposa feliz acepte el
desafío, y aquí estoy, haciendo de perito en siniestros.
Me saque el saco, la corbata, me desprendí y
arremangue la camisa, y me dispuse a hacer la siesta, abrí las ventanillas pues
estaba muy caluroso, aunque estaba del lado contrario al sol, aun estaba muy
alto así que más se hacía sentir, cerré
los ojos y al rato me quede dormido.
Me desperté
llegando a la capital, bajo del tren y me tomo un taxi que me lleva a casa,
estaba realmente muy cansado, así que lo primero que hice luego de saludar a mi
esposa fue darme una ducha, ya mas fresquito y con solo el pantalón del pijama,
me dispuse a cenar y contar todo lo vivido ese día, a mi señora
Ella no lo podía creer, por supuesto me recrimino por
mi actitud ante las autoridades del
pueblo, pensando que podría haber ocasionado graves problemas, si se me caía el
encendedor e iniciaba un incendio.
Luego me pregunta que pensaba hacer con ese caso, y le
respondí que ya tenía todo planeado, al día siguiente iría a ver al a esposa de
uno de los socios de la aseguradora, que pertenecía a la Sociedad Protectora de
Animales seguramente ella sabría cómo
realizar los contactos necesarios para llegar hasta las autoridades del
Zoológico, mientras cenábamos le termine de contar todo relacionado al trabajo
y al viaje, mientras ella me comentaba
las novedades de la casa, había llamado una de nuestras hijas para saber
como estábamos, y avisarnos que posiblemente el fin de semana nos visitaría.
Luego de una corta sobremesa, nos fuimos a la cama, yo
estaba muy cansado, así que me quede
dormido en el acto.
Sonó el despertador a las 6,30, me incorpore en la
cama y luego de una elongación de brazos para sacarme la pereza, me dispuse a
higienizarme, cuando salgo del baño, ya estaba levantada mi señora, y se
disponía a preparar el desayuno, termino de vestirme, me dirijo a la cocina, ya
tenía la mesa puesta, me sirvo el café, mientras mi esposa entraba al baño, yo
desayuno.
Pensando elaborar un plan para mis actividades
diarias, lo primero que haría es llevar los rollos de fotos al laboratorio para
su revelado, luego me iría directamente al trabajo, termine mi desayuno, salude
a mi esposa y salí a la calle, camine dos cuadras y tome el colectivo que me
llevaría a la aseguradora, de paso, deje las fotos para revelar, así para esa
misma tarde tendría las imágenes para
hacer mi informe.
Cuando llegue, los empleados me recibieron sonrientes
como haciéndose cómplices de alguna travesura, indudablemente ya se habían
enterado por don Pedro de lo ocurrido en Arroyito, luego de los saludos me
dirigí a mi oficina a preparar el informe, al rato llego
el tío de mi mujer y el socio, no se pudieron contener, y se vinieron
directo a la oficina, ambos sonrientes.
-¿Qué has andado haciendo por ahí? Asustando gente --,
según don Pedro, has revolucionado el pueblo de Arroyito, cuéntanos como es el
asunto, que es lo que paso.
Así pase a contar con lujo de detalles lo ocurrido, me
imagino que habrás documentado todo fotográficamente, me dice el socio, mi
señora se va a poner loca cuando se
entere de semejante herejía, seguro que va
a hacer algo.
Contaba con eso, le digo, ella tiene posibilidades de
llegar a las autoridades del Zoológico, para ir a buscarla, con gente
especializada, en el trato de ese tipo de animales.
Esa misma tarde retire las fotos del laboratorio,
separe las del incendio y envié las otras a la Sociedad Protectora de Animales,
por medio del socio de mi tío, al otro día ya estaba todo preparado para ir a
buscar a Luna, pedí permiso para acompañar a la gente del Zoo, y con el aval de
mis patrones, fui de la partida, al día
siguiente, por la tarde partimos en un Furgón Sanitario, preparado para estos
casos, éramos el chofer, el médico veterinario y yo, con toda la papelería
apropiada para retirar el animal en nombre de la S.P.de A. y del Zoo
Capitalino.
Viajamos toda la noche y al otro día a primera hora
estábamos en la puerta de la Municipalidad, a la espera del Intendente, a las
08,00 hs. Llego el doctor con el Secretario de Gobierno, ya estaban enterados
de que llegaríamos temprano, luego de las presentaciones formales , nos hace
pasar a su despacho, nos ofrece café, y pasa a contarnos algunas novedades, yo
le pregunto por Luna, y me dice que me quede tranquilo que está bien cuidada, y
agrega, sabe que tenemos algunos datos interesantes, nos pusimos en contacto
con el dueño del circo.
Luna había nacido ahí en cautiverio, y a los pocos
días murió su madre, fue criada por la esposa del cuidador, he aquí el motivo
de su mansedumbre, aun así tuvo mala suerte, pues al poco tiempo también
falleció su mama sustituta, en un trágico accidente. A partir de ahí, comenzó
su mala suerte, pues nadie le daba el
cariño al que estaba acostumbrada,
además por ser demasiado mansa, no le servía al circo más que de vista, ya que
en vez de demostrar su fiereza, se ponía a jugar con el domador, ese fue el
motivo por el que se la dejaron al gitano, en pago por el alquiler que debían.
Sabemos que tiene solo tres años de edad, aunque parece mayor debido a su mal
estado, estábamos en esa charla cuando se hace anunciar el Comisario. Lo hacen
pasar, me saluda primero, parece que vino con refuerzos me
dice sonriendo, y si le digo , por las dudas de que tenga que quedar detenido,
hago las presentaciones y seguimos con la conversación, bueno dice el Comisario
, al gitano ya lo ablande, le dije que si quiere recuperar la leona tendrá que
pagar toda la alimentación y medicinas necesarias para su cuidado, hasta que se
reponga.
No le gusto nada,-- que se lleven esa porquería--
dijo, así que esta la vía libre, igual haremos un acta de entrega, para que no
tengan problemas en el viaje de retorno.
Otra novedad
nos dice el Doctor, pueden creer que se ha hecho tan popular, que ahora todo el
pueblo quiere que se quede, no creo que sea posible le digo pues necesita
cuidados especiales, el veterinario asintió con la cabeza.
Salimos todos a
ver a Luna, encontramos que había gente de la Municipalidad limpiando la jaula
con una manguera que le habían dejado los bomberos, saludamos y les pregunto
¿cómo anda la nena?, Ella me estaba
dando la espalda, pero cuando sintió mi voz se dio vuelta, me saludo con un
ronroneo y se vino a que la acariciara, el veterinario se quedo sorprendido,
--esto es amor a primera vista-- dice sonriendo, pobrecita está muy desnutrida,
vamos a tener que canalizarla para darle suero. --¿Ustedes se van hoy?-- Nos
pregunta el Intendente, y, si, después que descanse el chofer, saldremos a la
nochecita, dice el veterinario, igual la vamos a cargar en el furgón para
canalizarla.
Dicho esto, busca su maletín y se prepara para inyectarle
un sedante, le pasa a través de la reja una soga, con la que la envuelve
presionando sobre la rej, para inmovilizar sus patas traseras, de esta forma
procede a darle el sedante que la dormiría por unas cuantas horas.
La cargamos en el furgón, donde había un colchón
preparado para que tuviera una cama cómoda para el viaje, ahí el veterinario la
canalizo y le coloco el suero.
Así que nos fuimos todos al hotel del pueblo a
descansar, y luego de un buen almuerzo ahí mismo, nos acostamos a dormir la siesta
hasta la hora de partir, a las 19,00hs , estaban las autoridades, esperando
para despedirnos, previa documentación fotográfica, de la entrega por parte del
Doctor , Secretario y Comisario, se había reunido medio pueblo en la plaza ,
para despedir a Luna, con todas las recomendaciones del Intendente para que no
los hiciera quedar mal, partimos, con la promesa que Arroyito seria conocido
como un pueblo de buen corazón.
Viajamos toda la noche, sin inconvenientes, llegamos a
la Capital, y nos dirigimos directamente al Zoológico, el sereno nos abrió las
puertas, y llevamos a Luna directamente a la enfermería, donde tendría una
jaula, preparada para ser atendida, la bajamos con mucho cuidado, como estaba
tan desnutrida pobrecita no pesaba nada.
Me había comentado el veterinario, que iba a costar mucho rehabilitarla, pues su estado
era bastante grave, deberían hacerle estudios y análisis, para saber cómo
estaba en principio su flora intestinal, sus riñones, y vías respiratorias.
Luego poco a poco con alimento balanceado y suero
normalizarían su sistema alimenticio hasta que pueda volver a comer carne, cosa
que puede llevar semanas, según el veterinario.
Luego de dejar a Luna en el Zoo, el chofer muy atento
se ofreció a llevarme a casa, antes de partir el mismo veterinario, me extendió
un permiso muy especial, para visitar a la leona cuando quisiera, es más me
rogo que no la abandonara, ya que había visto una simbiosis muy especial entre
nosotros.
Satisfecho con lo que había logrado, me fui a
descansar del viaje, cuando llegue, mi esposa ya estaba levantada, me preparo
el desayuno, mientras le contaba los pormenores de la misión de rescatar a
Luna, se puso muy contenta pues a ella también le gustan los animales y detesta verlos sufrir.
Me comento que el tío le había dicho, que me tomara el
día para descansar, no obstante ya tenía
decidido que por la tarde iría a la
aseguradora, a notificarles lo actuado, y llevar las fotos nuevas al
laboratorio, para luego enviarlas a la S.P.de A., que se encargaría de hacerlas
publicar en algún diario Capitalino, junto a los agradecimientos a las
autoridades de Arroyito.
Tres años después, Luna había recuperado gran parte de
su cuerpo, llegando a pesar 156 kilos, por su mansedumbre era la delicia de los niños, tenía su jaula
propia, con una fosa donde se ocultaba cuando se cansaba de la gente.
Habitualmente la visitaba los sábados, antes de que
abriera sus puertas el Zoo, don Pepe, el carnicero del barrio, tenía la
consigna de que el viernes debía conseguirme un corazón o un hígado entero para
llevarle a Luna de regalo.
No sé si me olfateaba, o presentía mi llegada, el caso
es que siempre la encontraba en actitud de espera, y cuando me veía me hacia
toda clase de ronroneo y comenzaba a dar
vueltas festejando mi llegada.
Entraba a la jaula, le daba la golosina que ella
saboreaba con deleite, mientras yo la acariciaba y la cepillaba.
Jamás olvidare, el ultimo día que la vi con vida,
luego de estar con ella y darle el bocado especial de los sábados, la cepille
bien , mientras le hablaba, ella se relamía sacándose la sangre de su boca,
cuando comencé a despedirme ,se acerco bien y comenzó a lamerme la cara , cosa
que nunca había hecho. Si serás regalona le dije, y la abrasé fuerte, salgo de
la jaula y le digo pórtate bien que el sábado vuelvo. Se sentó a mirarme y
alzando su cabeza al cielo, me regalo un rugido al mejor estilo de Alex, el
león de la película Madagascar, en ese momento vi a Luna brillar como el Sol.
Evidentemente se estaba despidiendo, al otro día me llaman del Zoológico
dándome la mala noticia de que Luna había muerto. Según el veterinario, había
tenido un paro cardiaco, o sea que se durmió y no despertó.
Eso me reconforto un poco, aun así, la sigo extrañando,
pese a que ya ha pasado mucho tiempo.
nocli
(1)
CARTA
DE UN LEÓN A OTRO
Perdón, hermano mío, si te digo
que ganas de escribirte no he tenido
No se si es el encierro
no se si es la comida
o el tiempo que ya llevo
en esta vida.
Lo cierto es que el zoológico deprime,
y el mal no se redime con cariño,
si no es por esos niños
que acercan su alegría
sería más amargo, todavía.
A ti te irá mejor, espero
viajando por el mundo entero
aunque el domador, según me cuentas
te obligue a trabajar mas de la cuenta.
Tu tienes que entender, hermano
que el alma tiene de villano
al no poder mandar a quien quisieran
descartan su poder sobre las fieras.
Muchos humanos, son importantes
silla mediante, látigo en mano.
Pero volviendo a mí, nada ha cambiado,
aquí desde que fuimos separados
hay algo, sin embargo,
que noto entre la gente,
parece que miraran diferente.
Sus ojos han perdido algún destello,
como si fueran ellos los cautivos
yo se lo que te digo
apuesta lo que quieras
que afuera tienen miles
de problemas.
Caímos en la selva, hermano
y mira en que piadosas manos
su aire está viciado de humo y muerte
y quién anticipar
puede su suerte.
Volver a la naturaleza
sería su mayor riqueza
allí podrán amarse libremente
y no hay ningún zoológico de gente.
Cuídate hermano, yo no se cuando
Pero ese día, viene llegando.
Letra :Chico Novarro
ISBN 978-987-33-6773-1
Sacado del Archivoscopio de La Nacion
Sacado del Archivoscopio de La Nacion
PAULA MANSILLA
10.01.2012
8:20 pm
QUE LINDO ES ENCONTRAR A MAR DE AJÓ Y SU HISTORIA POR ESTE
MEDIO. LEER LOS COMENTARIOS DE TODOS AQUELLOS QUE AMAN A MAR DE AJÓ TANTO COMO
YO.MIS PADRES SE CONOCIERON ESA CIUDAD Y AUN VIVEN ALLI.MI PADRE EL SR. RUBEN
MANSILLA TRABAJO MUCHO TIEMPO PARA EL MUNICIPIO INSTALANDO LOS EQUIPOS DE
COMUNICACION EN LOS BALNEARIOS DE TODA LA COSTA.FUE QUIEN INSTALO EL PRIMER
ASENSOR . Y ALGUNOS TAL VES LO RECUERDEN HACIENDO PROPAGANDA CON SU MAHARI ROJO
(QUE AUN TIENE) CON LAS BOCINAS EN EL TECHO.CON MI HERMANA TRABAJAMOS EN EL
LOCAL DE RECUERDOS QUE ESTA SOBRE LA PEATONAL LLAMADA “RECUERDERIAS PARIS” ESE
FUE NUESTRO PRIMER TRABAJO..SON TANTOS RECUERDOS Y TANTOS LUGARES QUE TENGO EN
LA MEMORIA …COMO RECORDAR CUANDO SE HACIA LA FIESTA DE LA CORVINA RUBIA EN LA
ENTRADA DE MAR DE AJÓ Y SE INSTALABAN PUESTITOS DE COMIDAS Y REDUERDOS A LO
LARGO DE LA AVENIDA.. HERMOSO LUGAR LO LLEVO SIEMPRE EN EL CORAZON Y AUNQUE YO
NO VIVO ALLI AHORA, TENGO MIS PADRES ALLI …PERO VOLVERE PARA DISFRUTAR DE SUS
PLAYA EXTENSA ALFOMBRAS DE ARENA BAÑADAS POR EL MAR..GRACIAS
Responder
sebastian
10.01.2012
10:40 pm
El mejor lugar del mundo, marajense hasta la muerte,
agradecido de estar otro verano mas aca
Responder
rita
11.01.2012
3:35 pm
Hace varios años vivo en mar de ajo, me crie en la vecina
San Bernardo! y hoy con casi 33 años eligo, cuido,amo y proyecto mi vida en Mar
De Ajo! Mi lugar en el Mundo. Sin dudad.
Hermosa nota…Magica
Responder
Gabriela
11.01.2012
6:24 pm
VOY DESDE HACE… 14 AÑOS… AMO ESE LUGAR HASTA INCLUSO ME
ENAMORE HACE 8 AÑOS… EN FIN ES UN LUGAR Q ME ENCANTA, SIEMPRE LO EXTRAÑO Y ME
ENCANTARIA EMPEZAR MI NUEVA ETAPA D VIDA ALLA…
Responder
SILVIA LOPEZ
12.01.2012
12:25 am
SOY QUIEN HOY TRATA DE SEGUIR, MI PAPA ANTONIO LOPEZ COMPRO
EL HOTEL CATALINA EN 1966, EL DUENO DEL HOTEL EL SILVIO DON CARRAL DIJO VENITE
QUE ESTO CRECE, CRECE Y YO LA NENA SE ME ABRIA EL APETITO CON EL AIRE DE MAR,
ASI ESTOY JAJAJA, GRACIAS MAR DE AJO, ACA ENCONTRO MI AMOOOOOR, ARME MI FAMILIA
Y SIGOOOOOOOO Y COMO AL PRINCIPIO TRATOOOOOOOO
Responder
VICTOR PEREZ MOLA
12.01.2012
1:49 pm
ES UNA ALEGRIA VER EN ESTE PRESTIGIOSO MEDIO NACIONAL QUE
RETRATEN ALGO DE LA HISTORIA DE MAR DE AJO, MIS ABUELOS ( JOSE MARIA PEREZ Y SU
FAMILIA) VIENERON EN 1938, ERAN SOLAMENTE 13 FAMILIAS, NI ARBOLES HABIA, SOLO
MEDANOS, JUNCOS Y MAR, GRACIAS A ESAS FAMILIAS QUE DEJARON SU VIDA APOSTANDO
POR ESTE LUGAR HOY TENEMOS UNA HERMOSA CIUDAD PARA LOS QUE VIVIMOS
PERMANENTEMENTE Y PARA EL RESTO QUE NOS VISITA CONSTAMENTE. GRACIAS
Responder
GABRIELA
12.01.2012
11:17 pm
AUNQUE AHORA VIVO EN MERLO (BS.AS.) SIENTO SIN PODER
EXPLICARMELO Q SOY MARAJENSE, AMO ESE LUGAR Y MAS Q NUNCA … AGUANTE MAR D AJÓ..
Responder
Vero Nunziante
13.01.2012
5:04 pm
Gabi! Muy lindo todo lo que escribiste y los comentarios
mucho mas aun!!
te mande un mail agradeciendo estas lineas… Yo ahora soy
parte de este lugar y me alegra mucho ver lo que significa este lugar para
muchos!
Un beso!
Responder
Gabriela Miño
14.01.2012
6:56 pm
Sabían algo estuve en Aguas verdes unos dìas, y por supuesto
no dejé de visitar Mar de Ajò, el cuál estuvo tan lindo como siempre. Gracias
Sebastiàn, Paula, Rita,Gabriela, Silvia, Vìctor Y Vero!!!, me encanta todo lo
que cuentan. Todos aquellos que quieran que publiquemos una galeria de sus
fotos de Mar de Ajó nos pueden escribir a archivoscopio@gmail.com.ar
Responder
Ruben
14.01.2012
10:35 pm
Gabriela, quiero agradecer que nos des a los habitantes de
este querido lugar,la posibilidad de escribir en un medio tan importante como
es La Nación.Luego de ver el escrache que me hizo Paula mi hija mayor, decidí
en primer lugar aclarar que si bien coloque dos ascensores , no fui el primero
en hacerlo, ya existían otros edificios que tenían ascensores.
Yo llegue a mar de Ajo por primera vez en la temporada 59-60
a veranear con mis padres,luego 60-61 y 61-62 que decidí quedarme a probar
suerte y aquí estoy, y aquí pienso morir si Dios no dice lo contrario.Mi padre
oriundo de Gral.Lavalle era amigo de don Jose Manrresa y paramos en sus
dptos.anexos al Hotel El Descanso otro año lo hicimos frente al hotel, en la
casita Sans Sousi del Sr. Mesina. Es tanto lo tengo para contar de este querido
lugar,hoy solo algunos recuerdos para los mas viejos y nostálgicos, en esa
época el ruido de la temporada en la costa estaba aquí, y se llamaba, Ocean con
sus tres pistas ubicada en lo que ahora es galería Ocean en la peatonal,era de
Jorgito Birrecci y Antonio Ceba, aun me parece sentir los sones de aquel
conjunto que se llamaba Serenata Tropical, en este lugar comenzaba la noche,
que luego seguía en San Bernardo, en La Tranquera del aleman Irwin, y para
rematar la madrugada en La Lucila,con los chicos de Hipiees………hasta la proxima
Responder
Gabriela Miño
16.01.2012
4:29 pm
Ruben gracias a vos y a todos por escribir desde el corazón.
Tu hija está muy orgullosa de que hayas colocado los ascensores en Mar de Ajó ,
no importa el orden … Un fuerte abrazo
Responder
osvaldo
17.01.2012
3:37 am
rubén, realmente tu mje es el que más me motiva e identifica,ya
que la primera vez que fui a Mar de Ajó, fue en esa época (1957), llovió y
tuvimos que entrar desde Santa Teresita por la playa ya que los caminos eran
intransitables,ibamos con mis hermanos y mis padres (qepd), recuerdos
imborrables, mis hermanos mayores no había noche que no fueran a bailar a la
“Ocean”, durante todo el mes de febrero, de tarde alquilabamos las bicis sobre
la calle H Yrigoyen cerca de Espora, frente a donde estaban los juegos, luego
ibamos a alquilar caballos en la diagonal, había un almacen de ramos generales
llamado la Estrella, donde los gauchos dejaban sus caballos en la entrada en un
palenque…
De esa época recuerdo que un gran habitué era el gran
arquero Amadeo Carrizo, en su mejor tiempo, vivía en un hotel llamado Gran
Playa iba con sus hijas y alquilaba carpa al lado nuestro en un balneario que
se llamaba “El Ancla” (frente al hotel)y el dueño creo que era un Sr Ciano
(fonetica),al lado de el hotel estaba la telefonica que tenía un conmutador con
CLAVIJAS, a muchas calles para que pudieran ser transitables por los carritos
que eran los “taxis”, se les ponía sobre la arena, paja traída de los pajonales
cercanos, tambien recuerdo que Aramburu siendo presidente fue un par de veces
al lugar y se lo vio en misa de domingo, también recuerdo que en la zona de los
médanos para el lado de la usina (Clifema) los 5 Grandes del Buen Humor
filmaron una de sus inolvidables películas…también recuerdo a Foto Mario
especial para los chicos con sus barquitos veleros en la playa, o con petisos, a
Foto Marcos con sus tiburones sacados en Punta Rasa y colgados frente al local,
o sus llamas (o guanacos?)por la playa dispuestos a volver inolvidables esos
dias…
Bueno, me encantó esta nota, y hay muchísimo para contar de
Mar De Ajo, aunque hace más de 30 años que no voy, siempre lo tengo en el
recuerdo, y me hicieron revivir momentos únicos, en especial por mis padres,
que fuimos muy, muy felices, gracias…
Responder
roxana
17.01.2012
4:32 pm
Osvaldo, Gabriela y demas blogueros, en este momento estoy
pasando las vacaciones y tomando café adonde dice Osvaldo en Espora e H.
Irigoyen escribiendo desde el bar Havanna , es aquí donde se alquilaban
bicis?,bueno pues hoy aquí en estas dos esquinas hay bares, en otra una tienda
y en otra una óptica, Mar de Ajó está tan linda como siempre, su gente también
cada vez más atenta y solidaria, hay menos que el año pasado, el clima
fantástico y los precios igual que en mi ciudad Rosario, o más barato en
algunos casos. El hotel Gran Playa está al lado del edificio donde habitamos y
el parador de la playa ha sido modificado este año y han puesto un piso más con
Spa, la variedad de espectáculos gratuitos es mucha, el ambiente es
absolutamente familiar. Osvaldo no lo dude y véngase que esta relindo!
A todos los marajenses los felicito por el esfuerzo , la
calidez y la educación con que nos tratan.
Responder
Ruben
18.01.2012
10:11 am
Osvaldo, como bien tu lo dices viajar en esa época era
realmente una odisea cuando llovía los caminos se ponían intransitables, pero
aun así la gente venia a veranear a estas hermosas playas, y como Amadeo
Carrizo, también era habitúe Martin Karadagian que paraba en el edificio
Mariano Moreno , gente de la farándula, y de los medios televisivos como el Sr.
Ruiz de Luque directivo de Canal 9 ,que tenia en la galería del mismo edificio
donde ahora esta Estrellita regalos , el Café “Ruque” donde se podía saborear
un rico café, recuerdo que como estaba el edificio en sin terminar, las paredes
estaban recubiertas con tapas de Long Play (discos de vinilo)caminando unos
pocos metros, foto Marcos donde se exhibían los tiburones como tu lo mencionas,
seguías unos pasos mas y en Buchardo, hoy Dr.Marano , estaba el barcito de don
Pedro Florio ,donde servia el vermout con 15 platitos ,ahí deguste por vez
primera los caracoles de tierra con salsa picante ¡¡una delicia!!, sobre esa
misma vereda como dejar pasar la vereda alta donde estaba la farmacia
“Birreci”, y volviendo hacia Irigoyen la panadería “La Primera” de doña Frida
en la esquina y cruzando Recuerderias “Paris” del Sr. Corral , con su artesanía
en caracoles que aun sigue estando, también como olvidar la cigarrería de
Duilio Muraro, donde estaba la propaladora con bocinas en las calles, que
alegraba las tardes con música mientras mantenía informados a los turistas, tal
vez alguno se acuerde de aquel jingle que decía “ Si vas a Mar de Ajo te deseo
– que tengas un feliz veraneo –y cuando regreses no te olvides – de traer
Alfajores Chapaleo “
Sobre esa misma vereda no puedo dejar de mencionar al vasco
Peña con su avanti en la boca, tejiendo mediomundos o a su cuñado el frances
Paillot que tenia una muy surtida librería y también vendía artículos de pesca
en la vereda de enfrente, pegado a lo que hoy es galería Ocean. Y hablando de
artículos de pesca no puedo deja de mencionar a las muditas , dos señoras
mayores que tenían un negocio de art. de pesca, en la diag. Rivadavia entre
Irigoyen y Lebenshon………mañana la sigo .saludos
Responder
Gabriela Miño
18.01.2012
6:32 pm
Ruben lo tuyo es maravilloso todos los datos e historias que
contas.Sin duda como siempre digo el blog se construye y enriquece desde el
otro lado por ustedes gracias!!! Gracias Roxana por contar todo con tanta
calidez
Responder
Ruben
18.01.2012
8:10 pm
Gabriela , los agradecidos somos nosotros que amamos este
lugar,porque tu nos das la posibilidad de hacer que se conozca mas, para mi es
cuestión de refrescar un poco la memoria, aunque ya no me queda mucha, a veces
me cuesta creer que hace ya 50 años que estoy viviendo aquí y creo que hasta
podría escribir un libro, sobre la gente de este lugar, muchos de los cuales ya
han partido no sin antes dejar buenos recuerdos….Gracias Gabriela
Responder
osvaldo
19.01.2012
12:05 pm
Ruben, es un gusto seguir recordando,ya que desde que leí la
nota,y con todos tus comentarios,se amontonan los recuerdos trataré de aportar
algunos más:la actual calle H Yrigoyen en esos años se llamaba Avellaneda, toda
la zona pertenecía al partido de Gral Lavalle, que era donde funcionaba el
cementerio; para tener una idea del viaje y su duración se hacían escalas con
los omnibus en Lezama o Chascomús, Dolores, Paraje El Centinela, Villa Roch, a
veces en Gral Lavalle y el camino antiguo se desviaba en lo de Pavón, en esos
lugares se requería información sobre el estado del camino, ya que el asfalto
llegaba hasta la salida de Dolores, se le ponían cadenas a las ruedas para
poder seguir(en tiempo lluvioso), y así y todo, los mismos más de una vez iban
a parar a la banquina, de donde eran horas de espera hasta que venía alguna
máquina de Vialidad o tractores de algún campo cercano para volver a la ruta,
recuerdo una compañía El Alba de Ajó,la Río de la Plata, después la
Estrella,unas camionetas tipo militar para unos 10/15 pasajeros de nombre Senna
o Sera.El cine que conocí estaba en la diagonal al lado de un mercado donde se
vendía Hielo para los comercios y las casas,ahí en un día de lluvia vimos con
mis hermanos Hansel y Gretel,le agregaban funciones,para los chicos de la
ciudad era una aventura concurrir a las jineteadas (Mar de Ajó era un pueblo
rural con mar y turistas en verano)o ver leones en alguno de los circos que
concurrían en temporada…No puedo dejar de mencionar a Ismael de León, un jóven
gaucho (en todo sentido)que alquilaba caballos, y también repartía leche suelta
a domicilio con los clásicos tarros… en la década del 70 lo ví trabajando en la
YPF de avda del Libertador…;del Hotel la Margarita recuerdo que los dueños eran
dos hermanos españoles (asturianos) Alvaro y Avelino no recuerdo el apellido…
Rubén gracias por el recuerdo de las señoras “muditas”, y
todos los demás, permitíme agregar unas palabras al jingle de los alfajores “si
vas a Mar de Ajó, te deseo,que no te toque un sólo día feo,y para completar tú
veraneo…” s.e.u.o por el tiempo y la memoria.
Gracias Gabriela, suscribo lo de Ruben, si nos das la
oportunidad seguiré
Responder
osvaldo
19.01.2012
12:46 pm
Roxana, gracias por tu comentario,te cuento en esa esquina
de Yrigoyen y Espora (S.O) con frente sobre Yrigoyen mirando hacia el mar,
había unos departamentos que se alquilaban y pertenecían a una familia de
apellido Kohen; la bicicletería estaba sobre Yrigoyen a mitad de cuadra de
“espaldas al mar” entre Espora y la diagonal, enfrente de la misma estaban los
“jueguitos” (metegol, flipper, tiro al blanco con aire comprimido), el dueño
del mismo tenía uno de los pocos televisores de la zona, chiquito para la
época, tipo pórtatil, y con su antena captaba canales del Uruguay, y quedábamos
absortos ante ese “milagro”…ya que si bien mis padres pudieron comprar el 1er
televisor en 1958, el único canal que se veía era el 7, y la tecnología
revolucionaria eran las famosas radios japonesas a pilas en el 60.
Aprovecho, para desearte a vos y todos los que están en
estos momentos, una MUY FELIZ ESTADIA, y que disfruten, ya que cómo se ve en
este foro, esos momentos quedan en nuestros recuerdos y nunca más se borran, en
especial compartidos con nuestros hijos y seres queridos, y sin distinción de
clases, religión, situación económica, junto con los estudios, es el mejor
legado que nos facilita la vida. Muchas gracias
Responder
roxana
19.01.2012
8:04 pm
Osvaldo , ahora en Yrigoyen con frente hacia el mar hay una
gran librería-juguetería, de espaldas al mar sobre Yrigoyen hay una heladería y
empieza una galería (allí funciona el Casino) y en esta esquina de Yrigoyen y
Espora han hecho un bar nuevo y arriba unos edificios de departamentos que
estaban en obra hace unos cuantos años (y quedaron bastante feitos pintados de
color bordó). Cambia todo cambia!!! Gracias Rubén Osvaldo y Gabriela , el blog
lo construimos entre todos y eso está bueno!!! Sugiero una idea si hay algo en
el archivoscopio de mi ciudad Rosario, me encantaría que lo publiques!
Responder
Gabriela Miño
20.01.2012
11:22 pm
Roxana por supuesto que hay mucho material de Rosario te
debemos el post!. Osvaldo sos un cronista de la ciudad me encanta todo lo que
escribis. Gracias Ruben!!. NO se olviden que todos los que tengan fotos de Mar
de Ajò me las pueden enviar al archivoscopio@gmail.com y las publicamos. Hasta
ahora no recibí ninguna y serìa lindo armar una galerìa con las fotos de
ustedes.
Responder
osvaldo
22.01.2012
5:56 pm
Gabriela, como te dije trataré de seguir volcando (si Ruben
me ayuda con la memoria), más recuerdos de los años 60: al sur pasando el hotel
Silvio, último lugar edificado, sobre la playa estaba el “cementerio de los
caracoles”, se hacían escursiones con los ya mencionados carritos/taxis, y en
el trayecto por esas playas vírgenes, era muy común ver tomando sol a grupos de
lobos marinos, y miles de gaviotas que hacían sus nidos en los médanos cercanos
a las playas, supongo que donde hoy está Nueva Atlantis; otras historias que me
vinieron a la memoria, una más “cholula” y de tipo leyenda era por el año
61/62, y contaban varios pescadores asiduos concurrentes al muelle (por esa
época no se pagaba el ingreso), que un día pasó por allí Yul Brinner (famoso
actor de Hollywood) quien estaba filmando en Salta la película “Taras Bulba”,
pero lo “llamativo”, no habló con nadie, ni llevaba elementos de pesca, sino un
par de “veleritos en escala” que arrojaba desde el muelle, y se quedaba
observando hasta que llegaban a la playa, como estudiando las corrientes del
mar… ya partió en silencio como había llegado…
La otra historia, mucho más drámatica, se refiere a las dos
caras de la guerra mundial en Europa: en las carpas que estaban frente al Hotel
Playa, vecinos a la nuestra, concurría una familia, cuya mujer mayor tenía unos
números tatuados en su brazo, y una vez les contó a mis padres lo que
significaban: “campo de concentración nazi”, recuerdo perfectamente a esa
mujer, delgada de ojos claros, tristes y/o distantes , pelo muy canoso, casi
platinado, muy educada y de un hablar suave, casi había que esforzarse para
escucharla…, a veces se sentaba sola mirando largo tiempo al mar, como un poco
apartada de su familia (creo que su hija, yerno, y nietos)…
la otra cara es el relato a mi padre (yo estaba con él) por
un señor español (creo que catalán) muy culto, que tenía, un local de venta de
diarios, atestado de libros,etc, sobre la calle Espora al lado del Hotel Playa,
frente al por entonces Sirmione Hotel y que llevaba muchos años en la zona,
“que hacía como 15 años (calculo principio de los 50), en un atardecer de frío
y ya había oscurecido, viniendo del lado de la playa por Espora, estando sólo
en su negocio, vió a un grupo de gente de “tipo germánico”, con ropas oscuras,
y algunas “maletas” en sus manos, que uno de ellos en español con “acento
extrajero”, le preguntó por un “bar o boliche” de ese tiempo, indicandoles él
su ubicación…Al otro día le preguntó al dueño de ese lugar, por esa gente, y
éste le dijo que habían estado hasta bien entrada la noche, cuando vinieron a
“buscarlos entre 3 y 4 autos, y partieron con rumbo hacia la ruta… sin que
nunca más se tuviera noticias de esa gente”; el señor diariero, suponía que
habían sido llevados hasta la playa en alguna lancha desde un barco de los que
hacían esa ruta, y eran nazis que venían a buscar refugio por estos lados…
Estas dos caras de la historia, como habrá infinidad de ellas parecidas, tienen
un denominador común, como lo demuestran millones de inmigrantes,Nuestra
Bendita República Argentina, tiene sus puertas abiertas, garantizado por
Nuestra Constitución Nacional, a todos los habitantes del mundo… Bueno, espero
que por favor Ruben, me ayude con el nombre de ese señor que vendía los diarios
y libros,y creo que tambien era estafeta postal, ya que me es imposible
recordarlo, y ya que está, si el periódico de Mar de Ajó que también lo vendía
ahí era el “Ecos de Mar de Ajó”.
Gabriela, respecto de las fotos, te prometo hacer un poco de
tiempo y buscarlas, y en éste momento se me ocurre pedirle a alguno de los
residentes (Ruben una vez más), si en alguno de los locales antiguos, o foto
Marcos, quedan algunas postales de entonces,que puedan enriquecer aún más este
blog…Una vez más muchas gracias.
Responder
Ruben
23.01.2012
4:53 pm
Osvaldo retornando a tu entrada anterior, no quiero dejar
pasar el comentario del Sr Ciano, sin lugar a dudas se trata de Salvador Siano
que junto a su hermano Humberto(papa de Silvia) que escribe en el blog, fueron
dos de los pioneros de esa época que dejaron su aporte al engrandecimiento de
este lugar.
Pero evidentemente tu tienes mas memoria que yo, que
recuerdas otra parte del jingle de Chapaleo, pero han pasado los años y a mi me
cuesta retrotraerme a esos tiempos duros para llegar hasta aquí, de por si el
camino de tierra era un serrucho destroza coches, y cuando llovía tenia lugares
intransitables, como olvidar la curva de San Clemente, al pasar la Ecia. La
Linconia y doblar hacia el sur sobre el viejo camino era terrible, yo guardo
algunos recuerdos personales de esa odisea, luego al llegar a Pavón, otro
sufrimiento para hacer esos pocos kilómetros, bueno pero era lindo y
pintoresco, y cuando regresabas tenias cosas para contar de esa aventura del
verano, luego entrabas al pueblo con sus calles cubiertas de paja y ya era otra
cosa, cuando yo vine, solo Francisco de las Carreras , tenia asfalto hasta el
barrio EL Silvio, el resto cubierto de paja como tu lo dices.
Mencionas el cine, y creo que merecería un capitulo aparte,
el cine era del Sr. Basso un verdadero pionero, el trajo la luz eléctrica,
antes que se formara Clyfema. La puso para su fabrica de hielo (que aun esta) y
luego la repartió para los vecinos, eso esta sobre la calle Espora frente a la
Diagonal y en aquella época al frente había un terreno baldío con forma de
triángulo, al lado de la fabrica estaba el cine, siempre sobre Espora entre
Francisco De Las Carreras y Lebenshon, tenia un acomodador Uruguayo, no
recuerdo su nombre pero era un personaje, recuerdo que el primer invierno que
me quede, y en un día lluvioso y frió se estreno la película “Los Pájaros” ,de
Hichcock , cuando termino al función creo que todos esperamos ver la calle
llena de gaviotas, luego Victor Garcia edifico el Cine Rex, en Irigoyen , en
donde estaba el mercado central, ahora el Bingo.
Para hablar de esa cuadra tengo que retornar al año 1962,que
fue cuando decidí quedarme apadrinado por una gran tipo que se llamo, Americo
Molinari ,tornero electromecánico salido del Otto Krause, el me dio lugar en su
taller y hasta me presto una vivienda “La Peregrina”, donde estuve viviendo
hasta que me pase al hotel El Descanso , ahí me relacione con mucha de la
juventud local, pues era la sede transitoria del Centro Español, que se estaba
construyendo, retornando a Molinari, después de dos temporadas como turista en
ese lugar habíamos hecho una amistad ,y sabiendo que yo trabajaba reparando
radios y tv, me insistía que en el lugar no había nadie que lo hiciera , y que
si me quedaba podía tener un buen futuro.
Le hice caso y aquí estoy, demás esta decir, que paso la
temporada con toda la algarabía del verano, llego el otoño, y el Mar de Ajo que
conocida se convirtió en un pueblo del lejano oeste, en esa cuadra, desde la
iglesia hasta Espora, había en verano mucho movimiento, repito estaba el
Mercado Central que era una especie de feria con puestos internos individuales,
al lado la despensa “La Paloma”, los locales de Garcia , (no Victor), que se
alquilaban y eran negocios, que hacían esa cuadra muy transitada, también el
telégrafo . El caso es que termino el verano y todo el mundo cerro y tapio sus
negocios con madera en X, y por la calle, el viento arrastraba grandes bolas de
yuyos y pasto seco que bajaban de los médanos del sur, lo que ahora es el
Parque Gral. Lavalle y era común, al otro día verlos volver con viento del
norte……..Hasta la proxima
Responder
Ruben
24.01.2012
12:35 pm
Aquí estoy nuevamente para contestarle a Osvaldo, referente
al nombre del señor que tenia su venta de diarios en los locales del Hotel
Playa, era don Manuel Casas, un pintoresco personaje de esa época, si no me
equivoco era quien distribuía el diario La Nación, lo veo con su saco gris con
hilos colgando de sus bolsillos (de los paquetes de diarios) y saludando al
estilo español antiguo, (no decía señor, decía “vuestra merced”).
Gabriela subió unas fotos que le envíe, quiero hacer la
salvedad de que en la foto 3/4 quien esta junto al chimpancé, no soy yo, sino
el dueño del monito de quien no recuerdo su nombre; como tu dices voy a tratar
de conseguir viejas postales y las voy a ir subiendo, fotos tengo muchas pero
son personales, y aquí se trata de recordar a Mar de Ajo y su gente pionera,
solo cuento parte de mi historia para ir hilando los recuerdos, retomando mi
nota anterior, pase el invierno y para la primavera, mi padre compro una casita
en Lebenshon 73,era un mono ambiente que pertenecía a Amalia Tasso de
Carabelli, para quien no lo recuerde, fue Pianista, compositor y director
(8 de septiembre de 1893 – 25 de enero de 1947)
Nombre completo: Adolfo Leandro Carabelli
Notable músico argentino, de los primeros que incursiono en
el Jazz en nuestro país, también paso por este lugar. Aquí levante mi taller de
servicio técnico, con materiales comprados a Pegoraro hnos. que estaban en el
predio que ahora esta “COTO” tengo muy presente a Don Domingo Pegoraro una
bellísima persona y a sus sobrinos Juanjo y Ruben que lamentablemente ya no
están en este plano, de mi tocayo tengo un recuerdo inolvidable por un gesto
que tuvo la noche de fin año, estando en el café “Ruque”, se entero que mi
familia aun no había llegado y me invito (casi sin conocerme) , a pasarla en el
salón de Marcos Park, donde se reunieron un montón de amigos a festejar la
llegada del nuevo año, esto muestra la calidad de persona que eran los
Pegoraro, felizmente aun lo tenemos a Carlitos con nosotros.
A partir de la compra de la casa, ya pase a ser residente,
aquí conocí a mis vecinos, enfrente tenia a. don Marcos Fuertes, con su almacén
de ramos generales y reparto de gas “EL CID”, un verdadero pionero, al igual
que Inocencio Fuertes, dueño del” Hotel Playa” quien llego a este lugar en el
año 1944, y al año siguiente su hermano. hasta la próxima
Responder
osvaldo
26.01.2012
4:44 pm
Ruben,primero quiero agradecer mucho tus respuestas, puesto
que llenan vacios en mi memoria, y admiro tu interés y esfuerzo por volcar en
éste espacio que nos facilitó Gabriela y La Nación, datos que van
“reconstruyendo” parte de la historia de la querida Mar de Ajó…
No puedo menos que mencionar, agradecer y felicitar también
a Foto Marcos por el video que recién ayer pude ver (no podía entrar a
Youtube), donde encontré varias de las respuestas e imágenes que te pedía en mi
anterior entrada, como por ej: el períodico Ecos de Mar de Ajó, fotos de los
carritos/taxi, balneario de los hnos Siano, las camionetas Sera, una foto de
Yrigoyen y Espora donde se ve la cartelera del cine y los deptos de Kohen con
su enorme tanque de agua, la foto de “La patrulla Chiflada”-una copia tenía en
su vidriera el Sr Casas- etc, etc.
Al respecto, Gabriela,quiero destacar porqué, éste artículo,
me motivó a escribir por primera vez, me identificó con Ruben y otros
Residentes (migrantes internos):
mis padres eran inmigrantes españoles de la década del 30,
se conocieron y casaron en la Argentina, trabajaban literalmente de sol a sol
,-papá se levantaba 4 y cuarto de la mañana, a veces dormía una hora de siesta,
mamá a las 7 nos mandaba al colegio,también trabajaba, volvíamos 16.45 (1/2
pupilos), leche, deberes, y recién nos juntábamos para cenar a las 21 hs y ver
“tele” (la distracción de mis padres); domingo por medio a la tarde, íbamos
todos juntos al cine y a cenar “afuera” o a lo de mi abuela materna; los
“chicos”,vida social con amigos de nuestra edad; nunca tuvieron auto; ahorraban
todo el año para, el mes de febrero completo, DISFRUTAR A PLENO de Mar de
Ajó,incluídos primos y/o parientes,llegámos a ser 15/20, alquilaban 2 carpas en
El Delfín, allí jugábamos al futbol, al voley (la primera cancha inaugurada por
los hnos Siano-quienes también enseñaron a varios de mis primos a nadar-primera
escuela en su tipo-esto es para Silvia ¿pudiera ser que tuvieran un
ayudante/carpero/guardavida, lugareño, muy conversador de apellido Rojas?),
pescar con el medio mundo o líneas en el muelle, andar a caballo, todo junto a
mi papá; mi mamá con alguna tía o prima, y su palita de jardín, disfrutaba
juntar almejas para “dejarlas purgar toda una noche en agua que le cambiaba dos
veces”, prepararlas en escabeche o con arroz; recargando las pilas para empezar
el año en marzo… durante unos 12 años, hasta que falleció mi papá, y no
volvimos más como flia, “preservando la pureza de los sentimientos” que
significa el lugar, ya más grandes y con propias familias, hemos hecho
“pasadas” hacia/desde otros lugares en la costa cada tanto…
Roxana, totalmente de acuerdo contigo en que todo
cambia…,Rosario tu ciudad, tuvo Su monumento a la Bandera creo que en 1958, fuí
con el colegio en excursión para ésa época por primera vez, luego volví en los
90 y más recientemente en el 2006 (puente con Victoria,la Peatonal, edificios
enormes,Terminal Fluvial, etc) y en el 2009 (Costanera- más edificios), pero,
lo que no cambia, y por ello, doy Gracias a Dios todos los dias por ser
testigo, es la capacidad del ser humano de producir “esos” cambios, como
ejemplo vale decir desde “las clavijas del conmutador del locutorio”, hasta el
modem de internet que permite ésta participación, reivindicando el espíritu de
quienes nos precedieron…
Gabriela, Ruben, Roxana, muchas gracias y hasta la próxima
Responder
osvaldo
26.01.2012
4:58 pm
Ruben,acabo de recordar y no quería dejar de agregar, la
“frustración”, ya siendo mayores,y luego de todas las penurias pasadas para
llegar a la costa aquí mencionadas, cuando a poco de construída la ruta
asfaltada, debieron dinamitarla en varios tramos, debido a las enormes
inundaciones que se produjeron que llegaron a aislar e inundar a la ciudad de
Dolores…creo que a principio de los 80, luego ya reparada, se produjo el “boom”
en toda la zona costera y su continuo crecimiento hasta la actualidad.
Responder
roxana
28.01.2012
11:58 am
Gracias Osvaldo y Rubén por instruirme a través del blog,
gracias por los elogios a mi bella ciudad, que está muy cambiada ahora. Pero
como todavía me queda una semanita aquí en Mar de Ajó, me la paso yendo por las
calles mirando para arriba y abajo buscando los lugares que uds. describen .In
situ y posteando de Espora y Costanera. Saludos !!!
Responder
Ruben
31.01.2012
6:13 pm
Bueno retomando el hilo anterior, les comento que el fondo
de nuestro terreno daba a los del Dr. Marano, con quien tengo amistad desde
aquellos tiempos y con quien he compartido agradables momentos, hablar de el,
seria hacer un libro aparte, aquí nadie ignora sus valores y sacrificios de
aquella época, de medico rural cuando tenia que hacer de dentista, partero,
cirujano y todo lo imaginable en su profesión, tener que movilizarse entre el
barro con caminos intransitables, en carros y hasta a caballo para ir a ver
algún enfermo. Así que bien merecido tiene el reconocimiento de tener una calle
con su nombre; y ya que estamos no olvidemos al Dr. Berteloti, otro medico
rural que recorría diariamente el camino hasta Gral. Lavalle en su Jeep con
lluvia y barro, para atender en el Hospital, llevando y trayendo enfermos a los
que jamas les cobro un peso, ¡que vocación! Serafin Luis Berteloti, sin dudas
te debemos una calle; recuerdo que cuando tenia que atender algún enfermo grave
de noche, para hacer tiempo iba a casa a matear y jugar al ajedrez, luego se
calzaba su gorra de vasco y salía con su maletín, a visitar su enfermito,
siempre sonriente y alegre, con su bondad a flor de piel llevando alivio físico
y espiritual a la gente. Dos pioneros a los que el pueblo les debe mucho.
Osvaldo, como no recordar la inundación del 80, si estuve
prestando servicio voluntario como radio aficionado durante 17 días en Lavalle,
haciendo de enlace con DC. La Plata, para conseguir recursos, y sobrevolé en
helicóptero con el Prefecto Raul Agusti , toda la zona , realmente
impresionante , teníamos dos mares uno de agua salada al este y otro de agua
dulce al oeste, Gral Conesa era una pequeña isla , al igual que Dolores, fue
muy lamentable la perdida de hacienda , además de la flora y fauna de toda la
cuenca del Salado.
Responder
roxana
02.02.2012
1:37 pm
Sr. Rubén conversando con la dueña del hotel Costa Isabel
tuve la oportunidad de mostrarle el video que hay aquí y mostrándose todos muy
alegres e interesados y vieron lo publicado y me dijo que aquí en este Hotel
funcionó una escuela ? podría contarnos algo de eso?. Anoche pasamos por
Lebebshon 73 y no encontramos la exacta dirección, pero mas o menos hay allí
hay una casa de construcción antigua, es allí donde ud refiere en su post?
También me refirió a la filmación de la película de los 5 grandes del buen
humor ! Cómo quiere la gente este terruño y con que amor lo describen! Cómo no
volver aquí…
Responder
Ruben
03.02.2012
11:19 am
Hola Roxana, te comento que en lebenshon 73 , ahora hay una
edificación nueva donde creo hay una escribania,caminando hacia la avenida casa
de por medio esta la vieja casa que era de los abuelos de Di Santis el actor,
en cuanto al hotel no conozco ningún hotel Costa Isabel….saludos
Responder
roxana
03.02.2012
1:13 pm
El hotel Costa Isabel esta en Costanera 67 entre ahora
Marano (el doctor que ud. menciona)y Libertador,antes se llamó HOtel La vieja
posada o Las Vegas y dicen que aqui hubo una escuela, uno de sus dueños está
siguiendo sus interesantes comentarios. La vieja casa la vimos ayer, lástima
que esta noche partimos hubiera sido interesante haber podido oir de ud. en
persona sus valiosos comentarios. Un saludo y lo felicito por sus recuerdos.!
Responder
paula
05.02.2012
4:56 am
Que emocionante y nostalgicos todos los recuerdos que han
ido recopilando en los tantos comentarios de Osvaldo y Ruben . Realmente me
llenan de alegria y lagrimas al reconstruir en mi memoria lugares que he
recorrido de muy pequeña. Lamento no poder estar alli para recorrer nuevamente
esas calles y lugares que mencionan (aunque ya no estan muchas de las
edificaciones originales ).
Graciela es enorme el agradecimiento de habernos reunido en
este blog para recordar y reconstruir parte de la historia de Mar de Ajó.
Responder
paula
05.02.2012
5:18 am
Perdon confundi el nombre Gabriela..(no Graciela) GRACIAS
Responder
paula
05.02.2012
5:29 am
Tambien recuerdo la inundacion a pesar de que tenia unos 8
años.. tengo la imagen de ir en auto por la ruta cuando ya estaba bajando las
aguas pero mirar hacia los lados , el campo era todo agua y en las partes donde
se dejaba ver el camino tambien se veian restos de reptiles ( viboras), y otros
animales muertos, una sensacion extraña, triste imagen…tambien recuerdo a papá
hasta tarde frente a su equipo de comunicaciones haciendo contacto con su amigo
Miguel Angel , pasando datos de personas buscando familiares afectados por las
inundaciones. muchos recuerdos…
Responder
Ruben
13.02.2012
9:49 pm
Aquí estoy nuevamente para recordar un poco viejos tiempos,
Roxana te comento que no sabia que en ese lugar había funcionado una escuela,
es posible que fuera antes de que yo llegara ya que esa casa es bastante
antigua; si, tengo muy buenos recuerdos de “Mi Delfin”, que estaba en lo que
ahora es Prefectura, en la foto 3/3 se ve al fondo sobre la playa “La Cabaña
del Oso” que mencionara anteriormente y sobre la bajada de Marano y Diagonal
con techo a dos aguas, nuestro querido Mi Delfin del inolvidable Osvaldo
Cardenas, este lugar merece un recuerdo muy especial ya que para muchos jóvenes
(y no tanto) era un refugio en verano e invierno, donde nos encontrábamos como
en un club, a compartir muy gratos momentos entre amigos junto a la calidez y
el afecto de su dueño, entre café, tragos y muy buena música, en este lugar
conocí el primer Magazine, equipo de audio antecesor del casette, con 8 pistas
en estéreo que hacia la delicia a nuestros oídos, aun conservo una cinta de
aquellas, que con el tiempo llego a mis manos y la guardo como una reliquia ,
tengo muchos magazine pero esta, era de Mi Delfin y tiene un lugar de
privilegio en mi colección , tal vez alguien la recuerde “Pandereta Verde” The
Lemon Pipers ; Osvaldito tenia muy buen oído y gusto, aquí podías deleitarte,
con la música que fuera de tu agrado desde la clásica, hasta incluso la griega,
aportada por Paulina y Demetrio “Mimi” pareja de griegos recién casados que
habían venido a residir, trayendo sus artesanías que los turistas podían
comprar en “Yvan” ,me invade la tristeza al recordar que el flaco Mimi ya no
esta entre nosotros q.e.p.d. fue un gran amigo de esos que no se olvidan; Una
anécdota de ese lugar, imposible de repetir ,una noche de Navidad luego
festejar hasta la madrugada el mar comenzó a sacar almejas, y por detrás, el
cardumen de corvinas salía hasta la playa y las sacábamos pateándolas , hoy
para sacar una corvina hay que embarcarse, entrar por lo menos 5km. y además
tener suerte.
Responder
roxana
14.02.2012
6:22 pm
Sr. Rubén:
Después de haber vuelto a nuestra ciudad, no dejamos de
extrañar allí, queremos volver a ver al portero José (del Ancla V), a los mozos
Ricardo y Luciano del restaurant San Jósé, al personal del Molino , al de la
panadería (La Nueva) esas delicionas facturas!), del almacén de la avenida
Rivadavia al lado del Ancla V (Le dicen el de la brasileña) , a la gente de la
vinería y del bar de Havanna, a los mozos amables del Tato, al del puesto que
vende mariscos enfrascados, al famoso Pelado que entretiene a los turistas, a
la Playa de la Prefectura Naval Argentina (segura para encontrar a niños
perdidos y su guardavidas), a los comerciantes de siempre esos
Responder
roxana
14.02.2012
6:37 pm
Esa GENTE tan cálida hacen que querramos volver ! Saludos a
todos los que postean.Gracias Sr. Rubén, Osvaldo , a Gabriela Miño que se le
ocurrió y a todos los que escriben y a los que son sus habitantes y nos esperan
y se aguantan los duros inviernos!
Responder
Gabriela Miño
14.02.2012
10:14 pm
Paula, Ruben, Osvaldo, y Roxana y a todos los que escriben a
diario gracias una vez más por generar esta comunidad con tan hermosos
recuerdos,les mando un fuerte abrazo, y les confieso que me estoy encariñando
mucho con esta nota y con ustedes. Y que siempre espero ver lo que escriben.
Responder
osvaldo
15.02.2012
4:07 am
Ruben, Roxana, y Gabriela, una vez más me siento motivado
por Uds, a seguir escribiendo, ya que si bien no dejo de entrar al blog, me
estaba faltando ánimo de hacerlo por motivos familiares (de salud), pero digo
presente. Los comentarios de Ruben una vez más disparan en mi los recuerdos,
por ej: lo de las corvinas detrás de las almejas en la playa, recuerdo una
foto-postal de Marcos, donde se veía claramente el “cárdumen” sobre la playa
con sus hocicos en la arena sacando almejas, principal alimento de las “rubias”
en la zona.Las corvinas venían siguiendo una corriente cálida del sur de
Brasil, para agosto/septiembre, las “negras” entraban en las rías de San
Clemente, donde se alimentaban de cangrejos y al mismo tiempo desovaban, luego
siguiendo hacia el sur durante el verano, para retornar con la misma corriente
a su punto de origen. Al respecto se comentaba en aquella época, que la
ausencia cada vez mayor de almejas era que literalmente las compañías
“enlatadoras”, araban la playa, para extraer las mismas, sumado a la cada vez
mayor presencia de turistas, construcciones con extracción de arena de las
playas,construcciones en el puerto de San Clemente, pesca con redes en las
rías, etc, cerraron el círculo perfecto en contra del ecosistema natural de la
fauna, donde, como ya había escrito, era posible ver desde lobos y leones
marinos en manadas tomando sol en las playas, infinidad de gaviotas y otras
aves (hasta algunos pingüinos) al atardecer limpiando” la playa, delfines
(toninas)desfilando en grupo paralelos a la playa ahí nomás de la
rompiente…etc.
Ruben, no quiero dejar pasar el comentario sobre don Manuel
Casas, y el diario La Nación, mi papá le compraba el mismo y Ecos de Mar de
Ajó, y si mal no recuerdo mirando su local de frente a la izquierda del mismo
sobre la pared tenía uno de esos carteles “enlozados” blanco (muy común en los
negocios de la época), donde si bien no recuerdo todo el texto decía Diario La
Nación,
en el centro del mismo.
Cambiando de tema, y a raíz del naufragio en Italia del
crucero Costa Concordia, me recordé del Margarita, y lo que había leído sobre
su Capitán, los 15 años de inhabilitación y el juicio al que fue sometido al
regresar a Europa… por razones de tiempo y espacio prometo, ampliarlo un poco
la pròxima. Muchas gracias una vez más a todos Uds
Responder
roxana
15.02.2012
5:16 pm
Gracias Gabriela, Osvaldo y Rubén, sería interesante saber
del naufragio del Margarita, hasta ahora y desde los años que vamos no hemos
podido ver sus restos, tan sólo por fotos. Sr. Osvaldo respire hondo y recuerde
el olor del mar de Mar de Ajó, de sus playas y seguro, seguro, los problemas
familiares (de salud) se mitigan enseguida!
Responder
Ruben
16.02.2012
8:54 am
Roxana, te recomiendo comprar el libro de Adriana Silvia
Cristina Pisani “LA FANTASIA DEL NAUFRAGIO” es un estudio muy bien documentado
de todos los naufragios en nuestras costas; Osvaldo lamentablemente no tengo tu
memoria, pero es muy posible lo que comentas del Sr. Casas, espero que te
mejores pronto para continuar con los recuerdos…..Saludos Cordiales
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